Derrota dolorosa en tierras gallegas merced a dos tempraneros goles pontevedreses y más lesionados en filas blanquiazules.
Una piedra más en el camino. Derrota frustrante en Pontevedra frente a uno de los máximos candidatos al título de liga, pero sobre todo bagaje más que cruento en cuanto a lesionados se refiere para la escuadra de Álex Izquierdo. Dos goles del cuadro encarnado en la primera mitad, el primero de ellos nada más arrancar el partido, losa más que pesada para las aspiraciones ribereñas en Galicia.
Partido de menos a más para la Arandina en la ciudad de Valle Inclán, pero derrota pese a todo para seguir instalados, una semana más, a cola de pelotón en la tabla clasificatoria del Grupo I de Segunda RFEF. Un tanto de Rufo nada más arrancar la cita y otro zapatazo de Yelko Pino pasado el cuarto de hora, golpes de realidad impactantes para un equipo que, pese a todo, trató de recomponerse, y luchar los puntos como el que más.
Sobre todo con llegadas peligrosas por banda obra de Raly Cabral y Kevin. Estiletes ambos blanquiazules en la tarde de este domingo junto a Frodo que propiciarían una de las jugadas más polémicas del encuentro al sancionar el colegiado con tarjeta amarilla al extremo berciano un claro derribo sobre éste en área local que hubiera podido significar el 2-1 y, que habría podido propiciar con ello también un potencial vuelco al sino del choque antes del descanso. Tras ello, un remate de cabeza de Frodo a saque de esquina que Edu Sousa enviaría a córner apenas instantes después del 2-0 gallego, un peligrosísimo mano a mano del propio Raly generado por una pérdida atrás del Pontevedra y otro disparo al palo de Frodo otra vez, cerrarían la terna de mejores acercamientos ribereños a costas de los de Pasarón.
Tras la reanudación y por necesidad, paso adelante blanquiazul. Para meter en ciertos problemas al equipo de Yago Iglesias, pero sin excesiva profundidad ante un equipo que poco a poco aprendería a jugar con la necesidad rival y que se beneficiaría mucho de las lesiones sufridas en bando visitante. La primera de ellas del ariete arandino Frodo, que caería al suelo fruto de un pinchazo en la parte posterior del muslo en una acción de ataque ribereña. La segunda de Gonzalo, relevo del anterior sobre el césped, y que también se vería obligado a abandonar el terreno de juego antes de tiempo.
Al final 2-0, derrota dolorosa, y más bajas de hombres importantes en un vestuario ya corto de efectivos de por sí y que podría verse obligado a recibir prácticamente en cuadro al Oviedo Vetusta la próxima semana en casa. No obstante, y sea como fuere, los que estén, volverán a tratar de darlo todo en un nuevo partido de liga. Una liga que se complica por momentos, pero un escenario también ante el que hay que mantenerse fuertes, concentrados, y tener fe en que las adversidades, por muchas que sean, terminarán por superarse.
Sala de prensa
Así valoró el encuentro Álex Izquierdo en la rueda de prensa post partido.
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