La Arandina cosechó en la tarde de ayer un valioso empate en un duelo trepidante ante una Gimnástica Segoviana que contaba sus partidos por victorias.
Las matemáticas dicen que todos los puntos valen lo mismo pero hay empates y empates. Si el punto del pasado miércoles ante La Granja tuvo un sabor muy amargo, el logrado ayer ante la Segoviana supo a gloria por varios motivos. Primero porque los azulgrana llegaban a Aranda sumando todos los puntos disputados. El segundo y más importante, que los de Álex Izquierdo cuajaron un gran encuentro para aprovechar las derrotas del Real Ávila y Numancia B, recuperar la segunda plaza y depender de sí mismos para alcanzar el primer objetivo de la temporada, meterse entre los 3 equipo del grupo que pelearán por el ascenso en la segunda fase.
Los locales, sabedores del resultado de los abulenses y del 0-4 que marcaba el electrónico en Soria, saltaron decididos a por la victoria con un juego intenso y vertical. Enfrente un gran equipo que no se amedrentaba y que buscaba combinar con velocidad. El resultado fue un bonito encuentro para los espectadores, con numerosas disputas en las que nadie cedía. En una de ellas, el ex blanquiazul Adeva, pudo ser expulsado por el colegiado al empujar con fuerza desmedida a Mozo tras una entrada de éste.
Sin embargo, la vistosidad en el juego no se tradujo en variaciones en el marcador gracias al buen hacer de las defensas de ambos conjuntos. Un lanzamiento desde la frontal de Rashiti y un balón profundo al albanés al que se anticipó Carmona fueron los avisos locales en el primer tiempo. Un remate desviado de Adeva en acción a balón parado y un tiro alto de Calleja, las escaramuzas segovianas en el tramo final de la primera mitad.
Tras el paso por vestuarios la Segoviana salió con algo más de brío aunque los locales no le perdían la cara al encuentro. Por desgracia, un balón mal blocado calló en pies de Adeva que no perdonó a su anterior club. Lejos de venirse abajo, los blanquiazules fueron a por el encuentro y lo lograron con una jugada de crack de Rashiti que cogió el balón en banda derecha, se marchó con potencia, dribló a un rival en el área y rompió la cadera de Rui para ajustar un zurdazo pegado al palo ante el que nada pudo hacer Carmona.
A partir de ese momento, la Segoviana hizo gala de la profundidad de su banquillo, lo que le permitió llegar más entera al tramo final del partido que una Arandina en la que repetían 8 de los futbolistas que jugaron entre semana. A pesar de ello, los visitantes sólo inquietaron la portería blanquiazul con un disparo de Arribas en el 88. Ello habla muy bien de la preparación física de los nuestros, que incluso debieron haber disfrutado de superioridad numérica en los últimos minutos, pero colegiado perdonó la segunda amarilla al gimnástico Javi Marcos tras una durísima entrada a Mozo.
Arandina 1
Álvaro, Pesca, Munguía, Peli (Rovira 70), Sagués, Rashiti, Mozo, Zazu, Santín (Barbero 85), Samu y Álex Díez.
Gimnástica Segoviana 1
Carmona, Rui, Javi Marcos, Manu, Adeva (Nogueira 65), Conde, Calleja (Ivi 83), Del Castillo (Diego Gómez 65), Adri, Viti y Borrego (Arribas 76)
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